miércoles, 2 de febrero de 2011

Iemanyá





Creo que emocionarse es
darse cuenta de algo.

mi alma desnuda y salvaje,

mas aún
reconocí otra evocación:

me encontré contigo

y éramos compañeros.

"El agua leuda a cada suspiro -pensé- Iemanyá es tan sensible..."

"ya lo sé" respondiste y coronaste la correspondencia con un beso.

Sonreí en aquel ensueño
de piel de bestia y epifanía
también sonrió mi boca
inyectada de eternidad descubría

que te amaba.